IDENTIFICACIÓN LEGAL

Nombre: COLEGIO BEATO JUAN XXIII.
Dirección: Cra 7 No. 2-32 Aguavivas centro.
Teléfono: 3205169484 – 3215834217.
Municipio: Puerto Libertador.
Departamento: Córdoba.
Naturaleza: Privado.
Carácter: Mixto.
Jornada: Preescolar 7:00 A.M – 12:00 P.M.
Básica primaria. 6:30 A.M – 1:00 P.M.
Básica secundaria: 6:30 A.M – 1:00 P.M.
Media académica: 6:30 A.M – 1:00 P.M.
Calendario: A.
Propietario: Fundación Beato Juan XXIII.
Modalidad: Académica.
Nivel: Preescolar – Básica- Media Académica.
Ciclo: Básica Primaria – Básica Secundaria.
Grados: Transición, 1º, 2º, 3º, 4º, 5º, 6º, 7º, 8º, 9º 10°, 11°
Nombre de La Rectora: LUZ ELENA AVILEZ CALDERA
Nit: 900578318-2
DANE: 323580006675
EMAIL: fundacionbeatojuan23@hotmail.com
Código ICFES: 177550
NATURALEZA JURÍDICA: Resolución de reconocimiento oficial: 00850 28 DE DICIEMBRE DE 2012 emitida por secretaria de educación y cultura departamental.
RESEÑA HISTÓRICA Y CARACTERIZACIÓN INSTITUCIONAL
Con el objeto de brindar claridad y ofrecer un mejor conocimiento y, comprensión al lector, es pertinente escribir unas líneas acerca de lo que ha sido el origen, evolución y desarrollo del Colegio Beato Juan XXIII, antes Colegio Diocesano Juan XXIII y en un principio Escuela Parroquial. No es posible tener una visión clara y precisa de esta institución docente sin el concurso de un personaje que fue vida y motor de ella, el Padre Guillermo Vivanco (feliz memoria), quien con la decidida participación y colaboración de la comunidad y de las fiestas y ferias de San Isidro Labrador, a través de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen cimentaron la Institución en todas sus estructuras.
El Colegio Diocesano Juan XXIII, a lo largo de sus cuatro décadas, ha prestado sus servicios a propios y extraños en el marco de sus limitaciones, pero con la convicción de estar actuando en función de una misión educadora, social y pastoral.
Su orientación siempre ha sido por naturaleza católica y las administraciones que por ella han pasado, encarnan los principios religiosos de la Iglesia Católica, por cuanto las personas que han tenido la responsabilidad administrativa practican los valores que constituyen la personalidad integral de todos los miembros de la Comunidad Educativa.
HISTORIA Y FUNDAMENTACIÓN LEGAL DE LA INSTITUCIÓN
En los inicios de la década del 70, Puerto Libertador era una región aislada y como corregimiento dependía del Municipio de Montelíbano, con una población analfabeta en su gran mayoría, cuya niñez en edad escolar no alcanzaba ser albergada en la única Escuela Comunal, hoy Centro Docente “José María Córdoba”, que era insuficiente para satisfacer las necesidades de la demanda educativa de ese entonces.
Aún más, los escasos recursos económicos de la población, no permitían que los niños salieran a estudiar a Montelíbano u otros municipios vecinos; situación agravante por las pocas vías de comunicación para la época. Urgía entonces, la necesidad de fundar una nueva institución educativa que respondiera a las expectativas de padres de familias y estudiantes para llenar el vacío que se venía presentando en materia educativa. En este contexto, surge en el año 1971, la Escuela Parroquial que más tarde se convirtió en el Colegio Cooperativo Juan XXIII y que hoy recibe el nombre de Colegio Juan XXIII, por iniciativa del Presbítero Guillermo Vivanco Pinedo (feliz memoria), gestor incansable de este proyecto educativo, apoyado por un grupo de padres de familia, personas cívicas y amantes del progreso e institucionalmente por la Prelatura del Alto Sinú y San Jorge hoy Diócesis de Montelíbano.
En el año 1974, se inicia el sexto grado bajo la dirección del profesor Jesús Palacios Perea.
En el año de 1978, después de 7 años la Escuela Parroquial se convierte jurídicamente en el Colegio Cooperativo Juan XXIII, ya que el 18 de diciembre de este año la Superintendencia Nacional de Cooperativas, expide la Resolución No. 0497 por medio de la cual se reconoce personería jurídica a la Cooperativa Especializada en Educación Juan XXIII, constituyéndose como la propietaria del colegio de ese mismo nombre.
Sin embargo, es de anotar que la aprobación oficial de la Básica Primaria, sólo se da el 4 de febrero de 1980 mediante resolución No. 02362, expedida por el Ministerio de Educación Nacional.
La Secretaría de Educación del Departamento de Córdoba, otorga Licencia de funcionamiento para los grados seis y siete, mediante resolución No. 001610 del 5 de octubre de 1978.
En 1979, la Licencia de funcionamiento es ampliada para el grado octavo, según resolución No. 01122 de julio 9 y se amplía a noveno grado, mediante resolución No. 00813 del 14 de agosto de 1980.
Para el año de 1981, el Ministerio de Educación Nacional expide la Resolución No. 2772 del 12 de marzo, mediante la cual se aprueban los estudios de sexto a noveno grado hasta nueva visita, quedando de esta manera legalizado los estudios tanto de la Básica Primaría como de la Básica Secundaria.
En 1988, llega a la rectoría del colegio la Lic. Hna. Hilda Juliao Fortich, quien gracias a su dinamismo y espíritu de progreso, logra que la Secretaría de Educación Departamental de Córdoba amplíe la licencia de labores a los grados décimo y undécimo, mediante resolución No.000840 del 23 de junio de 1988.
Es también, la Hna. Hilda Juliao quien consigue la legalización del nivel Preescolar después de varios años de estar en servicio, mediante la licencia de funcionamiento dada por la Resolución No. 00214 del 23 de junio de 1988 y, se distribuye el nivel por grados de acuerdo a las edades de los niños.
Ante la necesidad de graduar la primera promoción de bachilleres del Colegio Cooperativo Juan XXIII, la rectora de la institución, solicita a la Secretaría Departamental de Educación, Visita de Aprobación de estudios para la Educación Media Vocacional, la cual una vez realizada, se concede hasta 1992, para los grados de 6 a 11 mediante resolución No.002291 del 15 de diciembre de 1989.
Vencido el término de aprobación de estudios, la Secretaría de Educación Departamental ha prorrogado dicha aprobación en varias oportunidades, a través de las resoluciones Nos. 002869, 003435, 0001889 y 0005720 de diciembre 27 de 1993, noviembre 21 de 1994, mayo 2 de 1996 y noviembre 10 de 1997, respectivamente.
Mediante la Resolución No. 00065 del 17 de noviembre de 1998 se aprueban hasta nueva visita todos los estudios correspondientes a los niveles de Preescolar, Básica y Media e inclusive para la jornada adicional para adultos, bachillerato flexible y semiescolarizado.
UBICACIÓN GEOGRÁFICA DE LA INSTITUCIÓN
El Colegio Beato Juan XXIII, se encuentra ubicado en la parte noroccidental de la cabecera Municipal de Puerto Libertador y limitado por los barrios: la Cumbia, Miraflores, el Puerto y el Centro.
A su vez, el Municipio se localiza al Sur occidente del Departamento de Córdoba, en la Costa Norte de Colombia, delimitado geográficamente al Oeste con una estrechísima franja del Municipio de Montelíbano, separada por el río San Jorge hasta la entrada de la quebrada de Uré. Al Oriente, con el Municipio de Montelíbano con una franja que se estrecha cada vez más hasta la colindancia con el departamento de Antioquia por las quebradas de Uré y la Cristalina. Por el Sur, con el departamento de Antioquia y por el Norte con Pica Pica Nuevo o Montelíbano.
Misión
El COLEGIO BEATO JUAN XXIII busca impartir formación integral de los y las estudiantes, fundamentada en los principios CRISTIANOS CATÓLICOS, éticos y morales, inspirados en el evangelio y orientados por el ejemplo virtuoso de la virgen maría, haciendo énfasis en la construcción humana y profesional con el espíritu crítico e investigativo que le permita asumir un liderazgo con libertad y autonomía, para tomar decisiones sabias y oportunas, encaminadas a buscar soluciones a la problemática y los retos del mundo de hoy.
Visión
El COLEGIO BEATO JUAN XXIII hacia el año 2020, continuará preparando hombres y mujeres de la más alta calidad humana y académica; comprometidos con su proyecto de vida personal, regional y nacional con capacidad de lograr sus metas y objetivos; formándose como “Buenos (As) Cristianos (As) Y Honestos (As) Ciudadanos (As)”, para participar en la construcción de una sociedad más justa y solidaria.
FILOSOFÍA INSTITUCIONAL
El COLEGIO BEATO JUAN XXIII, es una institución católica, cuya filosofía se fundamenta en la persona como realidad relacional (hombres y mujeres capaces de relacionarse con Dios, consigo mismo, con los demás y con la naturaleza) en el marco del respeto a la dignidad humana y al medio ambiente, la observancia de los valores éticos y morales, la participación y la democracia para crecer en la libertad de investigación como premisa fundamental para trascender y transformar la realidad.
PRINCIPIOS INSTITUCIONALES
Los colegios de doctrina católica son considerados semilleros donde se cultivan valores y criterios que permitan a todas las personas que conforman la comunidad educativa, tener una forma de pensamiento y de acción libre, comprometida y responsable con la realidad personal y social en la cual se desenvuelven.
Muchos son los valores que se promueven en los colegios de doctrinas católicas y todos ellos se han resumido en el siguiente decálogo:
- AMOR A DIOS: es el valor por excelencia. Se constituye en la regla de oro de todos los pensamientos y actividades. La formación integral de las personas debe colocar en el centro de sus corazones y de sus vidas el amor a dios sobre todas las cosas.
- AMOR AL PRÓJIMO: no se puede educar para vivir solos. Es necesario propiciar una educación que conduzca a reconocer al otro como un referente fundamental y esencial en la realización de las personas. Reconocer la alteridad como base de toda expresión humana. Y, además, de ser un referente indispensable, es necesario educar conduciendo a cada persona al amor por el otro, con todo lo que el amor conlleva: respeto, solidaridad, tolerancia, lealtad, justicia, equidad y juicio sano.
- LA VERDAD: educar desde la verdad, en la verdad y para la verdad. La educación ha de tener como base fundamental e indiscutible la verdad. Verdad sobre el ser, sobre el quehacer, sobre el tener y sobre todas las posibilidades de cada persona. Verdad de la realidad, con sus principios y sus posibilidades propias de su misma naturaleza. Verdad reflejada en la honestidad de las palabras, de los pensamientos, de las intenciones y de todas las acciones. Hay que ser educadores de nuevas generaciones cuyo eje sea la verdad, frente a la cual, no se negocie nada ni nadie. La verdad que se opone a la mentira y a la falta de transparencia.
Implica verdad personal, verdad social, verdad científica, verdad religiosa, verdad política, verdad económica, verdad jurídica. Formadores de personas para quienes la verdad abarque todas las dimensiones de su pensar, de su actuar y de todas sus proyecciones. Hay que ser místicos de la verdad.
- EL DIÁLOGO: educar respetando y dándole toda la dimensión y el valor a la palabra, tanto escrita como hablada. Hay que educar personas que sepan comunicarse y permitan que los demás se comuniquen. Y, educar para que la expresión en su totalidad, sea dialogada. El diálogo supone la búsqueda de la verdad entre varios. Excluye considerar que la verdad y la razón es propiedad de una persona o de un grupo. Cuando se forma para el diálogo se permite que todos los que dialogan tengan los mismos derechos y deberes y puedan expresarnos libre y voluntariamente.
- LA TOLERANCIA: es uno de los valores urgentes en esta sociedad. Ser tolerantes es permitir que el otro exprese su alteridad en el sentido pleno de la palabra. Respetar su pensamiento, sus acciones, sus intenciones, y todo lo que él es como un ser diferente, dándole la posibilidad de equivocarse y de retractarse.
La tolerancia permite el perdón y el dar posibilidades al otro. Por la tolerancia no se le cierran los caminos a nadie. La tolerancia no es soportar indebidamente el querer del otro sin unas normas y reglas sociales; sino que, dentro de las más sanas y respetuosas relaciones sociales, se permite que el otro se exprese, actúe y piense diferente.
- LA LIBERTAD: es el valor más sagrado de una persona. Robarle la libertad a alguien, restringirla o desfigurarla es uno de los crímenes más graves contra la dignidad de la persona. Hay que ser educadores del respeto de la dignidad humana, teniendo como base que toda persona es libre y tiene derecho a realizar su libertad. La labor educativa, más que ser una tarea con base en restricciones y prohibiciones, ha de ser una labor preventiva cuya base sea la convicción personal en el sentido más amplio de la palabra.
- RESPONSABILIDAD: es la acción en el tiempo oportuno y bajo las circunstancias oportunas. Ser responsable es hacer bien lo que corresponde y hacerlo pensando no de manera egoísta sino de forma respetuosa con los otros. Es responder oportunamente con los compromisos adquiridos, imprimiendo calidad en el hacer y en el desempeño. La responsabilidad implica capacidad de decisión, de acción y de dirección.
- AFRONTAR LA VIDA: este es uno de los valores más englobantes de la educación. Ser educadores que conduzcan a que sus educandos sean capaces de afrontar la vida, tomándola con todas sus causas y consecuencias. No se puede educar sólo el pensamiento y sus propias estructuras, sino que se debe educar integralmente toda la persona para que tenga los instrumentos necesarios, que le permitan afrontar la vida y lograr su propia realización y la de aquellos que la comparten a su lado.
Cada colegio se desarrolla, desde el preescolar las respectivas competencias, habilidades, destrezas y dimensiones del ser humano, con el fin de preparar a los niños y a los jóvenes para afrontar la vida.
- APRENDER A APRENDER: la educación debe conducir a todos los que conforman la comunidad educativa a aprender no sólo conceptos, habilidades, competencias y acciones, sino también, y de manera prioritaria, aprender a aprender; es decir, ser capaces de abrirse a todo tipo de conocimiento. Renunciar a ciertos prejuicios y preconceptos que no permiten ir más allá de lo que se es, de lo que se piensa y de lo que se tiene.
No se trata de renunciar a los propios conocimientos, sino de dar margen abierto a otro tipo de conceptos, de comprensiones y de apreciaciones que permitan progresar en el conocimiento, en la búsqueda de la calidad y de la perfección de nuestro aprendizaje.
- SOLIDARIDAD, JUSTICIA Y PAZ: tres valores que han de estar siempre presentes en las acciones educativas. Ser solidarios para que el otro no pase desapercibido en la vida. Solidarios en las buenas y en las malas, que el otro sienta compañía y apoyo. Ser justos consigo mismo y con los demás. Saber reconocer los derechos y los deberes propios y los de quienes están al lado
Bandera

Himno
Coro
Noble colegio te aclama
Por siempre la juventud
Eres bastión de la patria
y vas sembrando en las almas
Cultura, ciencia y virtud.
Con fe, constancia y esfuerzo
Por sendas libertadoras
Nos brinda nuestro colegio
La luz de nuevas auroras.
Amigos siempre adelante
El porvenir nos espera
de paz y amor por Colombia
Alcemos nuestra bandera.
Servicio a Dios y a la patria
es nuestra meta suprema
y del colegio a la vida
“ciencia y moral nuestro lema”.
Noble colegio te aclama
Por siempre la juventud
Eres bastión de la patria
Y vas sembrando en las almas
Cultura, ciencia y virtud.
Organigrama
